Una de las dificultades en la calibración de sensores sanitarios es que los métodos de baño tradicionales dan como resultado una transferencia de calor inconsistente a la brida del sensor, debido al flujo de líquido y cambios de nivel.
El calibrador de temperatura RTC-168 incluye una técnica de calibración con patente pendiente, para la calibración líquida de sensores sanitarios, lo que permite a los operadores replicar el uso en el campo durante su calibración líquida, esto da como resultado una calibración del sensor que se asemeja mucho a su uso diario.
Su diseño aísla el líquido en el bloque principal del exceso de líquido alrededor de la brida. Este aislamiento elimina el efecto de flujo de líquido y la necesidad de un nivel de líquido preciso, lo que facilita la calibración en múltiples condiciones.
La transferencia de calor a la brida se maneja a través del aluminio del transportador de calor en lugar del líquido, creando una transferencia mucho más uniforme. Además, el transportador de calor optimiza la circulación del líquido en el bloque para la calibración de sensores sanitarios.
Adicionalmente, el calibrador RTC-168 también presenta una técnica de enfriamiento de flujo inverso pionera en la industria. Esta técnica empuja el aire caliente por la parte inferior del calibrador en lugar de por la parte superior. Esta innovación protege el sensor del cliente bajo los continuos aumentos de calor, proporcionando un entorno de trabajo más seguro para el técnico.
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